Las mascarillas respiratorias protegen contra el polvo fino, el humo o la neblina líquida (aerosol) y proporcionan cierta protección contra las infecciones bacterianas y virales por gotitas. Las mascarillas plegadas o conformadas autofiltrantes se dividen en las clases de protección FFP1, FFP2 y FFP3 (filtering face piece). La clase de protección define la estructura de los materiales del filtro.
La tecnología de ultrasonidos es el método ideal y económico para la producción de todo tipo de mascarillas protectoras. Dependiendo del tipo de mascarilla, se utilizan diferentes aplicaciones de corte, sellado y soldadura. De este modo, por ejemplo, mediante la tecnología de corte y soldadura de Telsonic pueden confeccionarse mascarillas terminadas a partir del material filtrante multicapa. La tecnología de ultrasonidos también puede utilizarse para fijar piezas adicionales como puentes nasales, válvulas o cintas elásticas para la cabeza.