Una cuchilla vibratoria por ultrasonidos trocea el producto con el mínimo esfuerzo, sin dejar residuos y de forma rápida y precisa.
El ultrasonido se aplica para cortar productos acabados desde hace años. En productos de panadería, barritas energéticas, queso, pizza, etc., el sonotrodo vibratorio (frío) reduce la resistencia durante el proceso de corte y se desprende automáticamente de los restos del producto.
Resultado: superficies de corte lisas y reproducibles sin deformación ni daño térmico en los productos.